INTRODUCCIÓN A LA TEMPORADA 4 “EL CONOCIMIENTO DEL EVANGELIO”

Evangelio

Parte importante de conocer a Dios es conocer la salvación que nos ha otorgado por medio del evangelio y cómo se manifiesta a nosotros a través de él, es por eso que a partir de este apartado en nuestra cuarta temporada vamos a profundizar sobre el conocimiento del evangelio.

LA PALABRA DEL EVANGELIO Y LA SABIDURÍA DE DIOS

1 Corintios 1:18-31 dice: “Porque la palabra de la cruz es locura a los que se pierden; pero a los que se salvan, esto es, a nosotros, es poder de Dios. (19) Pues está escrito: Destruiré la sabiduría de los sabios, Y desecharé el entendimiento de los entendidos. (20) ¿Dónde está el sabio? ¿Dónde está el escriba? ¿Dónde está el disputador de este siglo? ¿No ha enloquecido Dios la sabiduría del mundo? (21) Pues ya que, en la sabiduría de Dios, el mundo no conoció a Dios mediante la sabiduría, agradó a Dios salvar a los creyentes por la locura de la predicación. (22) Porque los judíos piden señales, y los griegos buscan sabiduría; (23) pero nosotros predicamos a Cristo crucificado, para los judíos ciertamente tropezadero, y para los gentiles locura; (24) mas para los llamados, así judíos como griegos, Cristo poder de Dios, y sabiduría de Dios. (25) Porque lo insensato de Dios es más sabio que los hombres, y lo débil de Dios es más fuerte que los hombres. (26) Pues mirad, hermanos, vuestra vocación, que no sois muchos sabios según la carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles; (27) sino que lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte; (28) y lo vil del mundo y lo menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, (29) a fin de que nadie se jacte en su presencia. (30) Mas por él estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría, justificación, santificación y redención; (31) para que, como está escrito: El que se gloría, gloríese en el Señor”.

Entendiendo la palabra Evangelio según su significado.

El evangelio es la palabra viva que proviene de Dios a los hombres, la cual porta para nosotros la vida eterna y las intenciones de Dios de acuerdo a Su gracia para con los hombres. Esta palabra aparece por primera vez en la biblia en los evangelios y llega a nosotros desde la palabra griega “euanguélion”, que significa “buen mensaje”.

Su construcción proviene de la palabra griega “eu” (neutro de un primario εὖς eús) que significa bueno, bien; y la palabra “ángelos” cuyo significado es mensajero, ángel.

El Evangelio es Cristo mismo.

Podríamos decir que evangelio no solo es un buen mensaje, sino que este mensaje incluye al mensajero. En el evangelio tenemos un mensaje que anuncia a Cristo, pero también es Cristo quien contiene un mensaje para el hombre. El mensajero porta un mensaje, pero el mensaje es el mensajero mismo. Cristo es el evangelio y es importante entenderlo, porque nunca el evangelio se conformará a un conjunto de palabras, preceptos, dogmas o conceptos religiosos. El evangelio no se conforma a letras ni palabras, porque ninguna palabra puede contenerlo. Esta palabra es viva y actúa en nosotros para salvación, santificación y perfección para Dios. (Isaías 55:11, Hebreos 4:12, Juan 6:68.)

Conclusión:

Podemos hablar, anunciar, predicar, enseñar el evangelio lo cual es necesario hacerlo así, pero debemos tener en cuenta que este evangelio no se conforma solo a lo que se dice, sino que es vida misma de Dios abriéndose camino en nosotros hasta producir aquello por lo cual fue enviado por Dios.

Le invitamos a separar el tiempo necesario para orar al Padre pidiéndole que sean alumbrados los ojos del entendimiento y le sea revelado el evangelio verdadero que es Cristo mismo, esperanza de Gloria.

Recomendamos la lectura del libro “En Cristo, en Su Cruz” de Abel Ballistreri, para ampliar el entendimiento de los principios básicos acerca del evangelio.

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