LA CRUZ ES LA VICTORIA MISMA

Muchos predicando el evangelio tienen expresiones como estas: “Cristo murió en la Cruz, pero resucitó”. Ese “PERO” ESTÁ DE MÁS, es un “pero” que menosprecia la muerte de Cristo y la hace ver como un trámite intermedio; eso no es lo que anuncia el evangelio verdadero y genuino. Jesús dijo estas palabras: “CONSUMADO ES” y eso no fue dicho luego de resucitar, en el momento de estar Él en la cruz. Por esto, LA CRUZ ES LA VICTORIA MISMA del Señor y es justamente lo que debemos oír para recibir el evangelio autentico. En consecuencia, si entendemos el evangelio genuino y verdadero, no sólo tendremos un testimonio de Su resurrección, sino que seremos eternamente una expresión de esa vida consumada por Él y que nos impartió a nosotros.

En síntesis, la palabra de la cruz, entre otras cosas, nos habla de:

  • La reconciliación con el Padre.
  • La justificación completa en la cruz.
  • El ámbito de justicia que nos es ofrecida por el Señor.
  • La Gloria de la Sabiduría de Dios.
  • La obra completa y consumada eternamente por nuestro Señor Jesucristo y la propuesta para nuestra vida en la tierra: EL NUEVO PACTO.
  • El camino abierto por Dios, para una nueva manera de vivir nuestros días en la tierra.
  • El parámetro de éxito de Dios para nuestras vidas.

VIVIENDO EN SU RESURRECCIÓN

En el sacrificio de Cristo nos fue otorgada la vida eterna y fuimos incluidos en Él y con Él en Su resurrección.

Manifestamos esa resurrección a través de nuestras almas, cuando son quitadas de nuestra mente y corazón toda mezcla que pueda atentar contra nuestra madurez. Expresamos de esta manera que la resurrección de Jesucristo opera, cuando en nosotros mismos van cayendo estructuras de ignorancia formadas por pensamientos, filosofías, idolatrías, imaginación religiosa y toda otra tradición humana, dando lugar así al entendimiento de un evangelio vivo y verdadero en nosotros.

La palabra viva del evangelio nos separa de la inexistencia eterna, de la muerte y de las tinieblas, y nos traslada a la vida, para ser luz en Cristo Jesús.

Manifestamos la resurrección de Jesucristo, en quien hemos sido incluidos, cuando la semilla de vida en nuestro espíritu se abre camino en el tiempo, en nuestras almas, en pensamientos y palabras; por medio de acciones y reacciones que tienen un solo origen: nuestro espíritu. Esa vida requiere un solo tipo de alimento: la palabra de Dios, permitiéndonos ser libres de la influencia y gobierno de todo lo externo a nuestras vidas.

0 comentarios en “LA CRUZ ES LA VICTORIA MISMA”

  1. Buenos días , gracias y bendiciones por este poderoso estudio simple y penetrante al corazón. Siempre he oído predicadores que usan este (pero) en cuanto a la cruz y la resurrección. Gracias por esta corrección porque este Evangelio el completo y poderoso Para nuestras almas.

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