SEPULTURA EN CRISTO

Romanos 6:4 dice: “Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en vida nueva”.

Colosenses 2:11-12 dice: “En él también fuisteis circuncidados con circuncisión no hecha a mano, al echar de vosotros el cuerpo pecaminoso carnal, en la circuncisión de Cristo; (12) sepultados con él en el bautismo, en el cual fuisteis también resucitados con él, mediante la fe en el poder de Dios que le levantó de los muertos”.

Venida a nosotros la nueva vida, la vida espiritual, es evidente que la vieja vida (o la muerte en la que andábamos) sea quitada de en medio.

Israel siempre tuvo bautismos entre sus ritos, pero nunca pudo comprender lo que esos bautismos y abluciones significaban. Nicodemo no pudo comprender lo que Jesús decía al hablar del nuevo nacimiento (Juan 3). La purificación que Jesucristo nos ha propuesto no es una limpieza superficial para continuar viviendo en la vieja vida, sino un nuevo nacimiento.

Nuevo nacimiento es nueva vida. Nueva vida exige que lo viejo sea quitado.

A eso se refiere el escritor a los hebreos al decir:

Hebreos 13:12-14 dice: “Por lo cual también Jesús, para santificar al pueblo mediante su propia sangre, padeció fuera de la puerta.  (13)  Salgamos, pues, a él, fuera del campamento, llevando su vituperio;  (14)  porque no tenemos aquí ciudad permanente, sino que buscamos la por venir”.

Cuando los sacerdotes sacrificaban al animal por los pecados del pueblo, ellos podían continuar viviendo sus antiguas vidas con normalidad, dentro del campamento. Pero cuando somos expuestos al Verdadero Sacrificio, nuestra reacción no es la misma que la de aquellos hombres. Nuestro impulso no puede ser el continuar con la vieja vida, sino comprender que debemos salir del campamento. Debemos dejar atrás la pasada manera de vivir.

Efesios 4:22 En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos.

Podemos comprender que el Bautismo Espiritual es aquel que nos revela la nueva vida en Cristo y despierta en nosotros el anhelo de madurez y ser parte del Propósito Eterno de Dios.

El bautismo en agua es una acción consciente, una determinación del alma de ir a la sepultura. Esa acción no tiene acciones mágicas, pero podrá ser una ayuda a memoria frente a las circunstancias de la vida que nos recuerde que conscientemente hemos decidido sepultar el viejo hombre.

Esa sepultura nos dice que:

  • Ya no buscamos los mismos placeres que buscan los demás.

Romanos 7:22 Porque según el hombre interior, me deleito en la ley de Dios.

  • Ya no tenemos en la tierra nuestra ciudadanía, aunque caminamos en ella como extranjeros y peregrinos.

Hebreos 13:14 porque no tenemos aquí ciudad permanente, sino que buscamos la por venir.

1 Pedro 2:11 Amados, yo os ruego como a extranjeros y peregrinos, que os abstengáis de los deseos carnales que batallan contra el alma.

  • Ya no vivimos por nuestra justicia propia, ya que hemos renunciado a ella.

Filipenses 3:9 y ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia, que es por la ley, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia que es de Dios por la fe.

  • Ya no nos pertenecemos a nosotros mismos, sino que tenemos un dueño.

1 Corintios 6:19-20 ¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? (20) Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios.

  • Ya no vivimos por el juicio de hombres ni sus opiniones, como tampoco por las nuestras.

1 Corintios 4:3-4 Yo en muy poco tengo el ser juzgado por vosotros, o por tribunal humano; y ni aun yo me juzgo a mí mismo. (4) Porque aunque de nada tengo mala conciencia, no por eso soy justificado; pero el que me juzga es el Señor.

  • Toda nuestra búsqueda en la tierra es la participación de los negocios eternos del Padre.

Lucas 2:49 Entonces él les dijo: ¿Por qué me buscabais? ¿No sabíais que en los negocios de mi Padre me es necesario estar?

  • Cuando nuestra alma atraviesa sufrimientos, recordamos que hemos sido sepultados a esa vieja vida, y lo que buscamos ya no es nuestra comodidad ni placer personal. Por esa sepultura buscamos participar de padecimientos más relevantes, aquellos con consecuencias eternas.

1 Pedro 4:12-14 Amados, no os sorprendáis del fuego de prueba que os ha sobrevenido, como si alguna cosa extraña os aconteciese, (13) sino gozaos por cuanto sois participantes de los padecimientos de Cristo, para que también en la revelación de su gloria os gocéis con gran alegría. (14) Si sois vituperados por el nombre de Cristo, sois bienaventurados, porque el glorioso Espíritu de Dios reposa sobre vosotros. Ciertamente, de parte de ellos, él es blasfemado, pero por vosotros es glorificado.

2 Timoteo 3:10-12 Pero tú has seguido de cerca mi enseñanza, conducta, propósito, fe, paciencia, amor, perseverancia, (11) persecuciones y aflicciones, como las que me sobrevinieron en Antioquía, Iconio y Listra. Todas estas persecuciones he sufrido, y de todas me libró el Señor. (12) También todos los que quieran vivir piadosamente en Cristo Jesús serán perseguidos.

Filipenses 3:10 Anhelo conocerle a él y el poder de su resurrección, y participar en sus padecimientos, para ser semejante a él en su muerte.

0 comentarios en “SEPULTURA EN CRISTO”

  1. Nuestra formación en cristo nos hace ser corregidos para vivir una nueva vida en cristo expresar al hijo. tenemos que pasar por el fuego para ser aprobados. 1 Pedro 4:12-14 ……hasta ser 2 : 20….gracias gracias y gracias

  2. Hermano Gloria a Dios por la gracia con la que impartes la VERDAD. Te honro y afirmo y anime a SEGUIR edificandose pons como Cuerpo de CRISTO!

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